¿Qué es la Pascua?

El tiempo pascual comprende cincuenta días (en griego = «pentecostés», vividos y celebrados como un solo día: «los cincuenta días que median entre el domingo de la Resurrección hasta el domingo de Pentecostés se han de celebrar con alegría y júbilo, como si se tratara de un solo y único día festivo, como un gran domingo» (Normas Universales del Año Litúrgico, n 22).
El tiempo pascual es el más fuerte de todo el año, que se inaugura en la Vigilia Pascual y se celebra durante siete semanas hasta Pentecostés. Es la Pascua (paso) de Cristo, del Señor, que ha pasado el año, que se inaugura en la Vigilia Pascual y se celebra durante siete semanas, hasta Pentecostés. Es la Pascua (paso) de Cristo, del Señor, que ha pasado de la muerte a la vida, a su existencia definitiva y gloriosa. Es la pascua también de la Iglesia, su Cuerpo, que es introducida en la Vida Nueva de su Señor por medio del Espíritu que Cristo le dio el día del primer Pentecostés. El origen de esta cincuentena se remonta a los orígenes del Año litúrgico.
Los judíos tenían ya la «fiesta de las semanas» (ver Dt 16,9-10), fiesta inicialmente agrícola y luego conmemorativa de la Alianza en el Sinaí, a los cincuenta días de la Pascua. Los cristianos organizaron muy pronto siete semanas, pero para prolongar la alegría de la Resurrección y para celebrarla al final de los cincuenta días la fiesta de Pentecostés: el don del Espíritu Santo. Ya en el siglo II tenemos el testimonio de Tertuliano que habla de que en este espacio no se ayuna, sino que se vive una prolongada alegría.
La liturgia insiste mucho en el carácter unitario de estas siete semanas. La primera semana es la «octava de Pascua’, en la que ya por rradici6n los bautizados en la Vigilia Pascual, eran introducidos a una más profunda sintonía con el Misterio de Cristo que la liturgia celebra. La «octava de Pascua» termina con el domingo de la octava, llamado «in albis», porque ese día los recién bautizados deponían en otros tiempos los vestidos blancos recibidos el día de su Bautismo.
Dentro de la Cincuentena se celebra la Ascensi6n del Señor, ahora no necesariamente a los cuarenta días de la Pascua, sino el domingo séptimo de Pascua, porque la preocupaci6n no es tanto cronológica sino teol6gica, y la Ascensión pertenece sencillamente al misterio de la Pascua del Señor. Y concluye todo con la donaci6n del Espíritu en Pentecostés.
La unidad de la Cincuentena que da también subrayada por la presencia del Cirio Pascual encendido en todas las celebraciones, hasta el domingo de Pentecostés. Los varios domingos no se llaman, como antes, por ejemplo, «domingo III después de Pascua», sino «domingo III de Pascua». Las celebraciones litúrgicas de esa Cincuentena expresan y nos ayudan a vivir el misterio pascual comunicado a los discípulos del Señor Jesús.
Las lecturas de la Palabra de Dios de los ocho domingos de este Tiempo en la Santa Misa están organizados con esa inrenci6n. La primera lectura es siempre de los Hechos de los Ap6stoles, la historia de la primitiva Iglesia, que en medio de sus debilidades, vivió y difundió la Pascua del Señor Jesús. La segunda lectura cambia según los tres ciclos: la primera carta de San Pedro, la primera carta de San Juan y el libro del Apocalipsis.
Fuente: ACIPRENSA.COM
Etiquetas
Secciones
Más Leídos

La emotiva carta de San Luis Gonzaga a su angustiada madre antes de morir

Nuestra Señora de Cuapa, 8 mayo de 1980

Hoy, Lunes de la Octava de Pascua, la Iglesia Católica celebra el «Lunes del Ángel»

Oración a Nuestra Señora de La Merced

Oraciòn Regina Coeli O Reina del Cielo
Lecturas del Sábado de la 1ª semana de Adviento
Lectura del libro de Isaías (30,19-21.23-26):
ESTO dice el Señor, el Santo de Israel: «Pueblo de Sión, que habitas en Jerusalén,...
Sal 146,1-2.3-4.5-6
R/. Dichosos los que esperan en el Señor V/. Alabad al Señor, que la música es...
Lectura del santo evangelio según san Mateo (9,35–10,1.6-8):
EN aquel tiempo, Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, proclamando...